
Tengo la mala costumbre de invocar fantasmas.
Y digo mala por que una vez aqui, nunca se que hacer con ellos...
Me acarician ,
me platican,
me llaman...
revivimos las cosas que nos gustaban cuando estabamos mas cerca...
y luego viene lo terrorifico.
Empiezan a buscar huecos donde quedarse,
se enredan en mi ropa,
en mi sabanas ...
les gusta meterse en mis perfumes para luego salir en el aroma y hacerme tangible su presencia.
Se meten en las plumas y luego al escribir, escribo solo sobre ellos...
Me abrazan con brisas de otros tiempos y me peinan el cabello.
Y se van quedando aqui.
Conmigo
cerquita...
y se van sumando...
y se van quedando...
ahi viene el que sigue.
2 comentarios:
Yo tengo un fantasma que vive en mi radio, uno en mi computadora, uno en una almohada vieja y otro que está de viaje.
Muy chido.
El mió salió levantando sábanas... jajaja.
Saludos!
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